Recientemente hemos visto cómo Tesla ha puesto de nuevo en catálogo el Model S de 60 Kw, aunque es una versión retirada hace un tiempo esconde unas características importantes, en realidad es el 75 Kw pero rebajado por software a 60 con ello nos han acercado más al bolsillo el acceso a la marca pudiendo optar a actualizarlo cuando nuestra economía nos lo permita.
Por otro lado tendremos el diseño actual sin la falsa entrada de aire y las opciones de sus hermanos mayores, pudiendo añadir también a posteriori el autopilot o el cargador interno de alta potencia que reduce los tiempos de carga.
A mi entender es una jugada maestra con muchas ventajas, la principal es la económica acercando un modelo de éxito a más potenciales compradores, pudiendo mejorarlo más adelante, también como apunta nuestro compañero Saúl López el poder acceder a subvenciones en países donde el tope de gasto era un impedimento y un nuevo modelo de venta.
Pienso también que hay motivos más profundos y que son a tener en cuenta, Tesla necesita dinero para acometer el proyecto Model 3, con este movimiento aumentarán las ventas y la entrada de efectivo, al mismo tiempo la cadena de producción se irá afinando.
Si no hay retrasos, para dentro de 13 meses debería entrar en producción el Model 3, es un ambicioso plan, 80.000 vehículos este año, 200.000 el próximo y 500.000 en 2018.
Cuando miro la evolución de Tesla no puedo evitar recordar aquella frase de otro "loco visionario" Steve Jobs que decía que un día mirando hacia atrás ves que todos los puntos se unen, no hay nada dejado al azar, es un plan muy bien diseñado y con un fin... Implementar el vehículo eléctrico sí o si.
Suerte Elon